El hombre de hoy se enfrenta a una nueva epidemia: el estrés. Si bien, no es una enfermedad, el estrés está haciendo mucho daño a una gran cantidad de personas en todo el mundo.
El estrés es básicamente un fenómeno fisiológico de reacción del organismo ante diversos estímulos del medio en que uno se desenvuelve, y que evidentemente, al estar expuesto a un sostenido, prolongado, e intenso estrés, puede provocar una serie de desórdenes a la salud física y mental del individuo. Incluso, se ha demostrado científicamente, que el estrés provoca enfermedades. Hay típicas enfermedades propias del estrés como la hipertensión arterial, la diabetes, el hipertiroidismo, la obesidad, la angustia y la depresión.
Generalmente cuando una persona se está estresando aumentan sus latidos cardíacos, le sube la presión arterial y el calor corporal de la piel aumenta. Consignemos también que este problema no se cura, debido a que el estrés no es una enfermedad. Sin embargo, sí podemos medir el estrés, podemos prevenirlo y podemos aprender a controlarlo y, desde luego, estas son técnicas que ya se están desarrollando para ayudar a la gente a prevenir el estrés generado por la vida moderna.
Cabe señalar que el estrés también produciría cierta adicción a las drogas y al alcohol, por lo que podemos llegar a considerar que este fenómeno de la drogadicción y el alcoholismo, más los antes ya señalado sobre la depresión, que tenemos que estar concientes de la calidad de vida que llevamos como sociedad, como Chilenos, como también podemos tomarlo como índice para darnos cuenta que medidas tomar para solucionar dichos flagelos.
Estadísticas en Estados Unidos muestran que en el año 2020 la depresión va a ser una de las patologías más frecuentes en la población mundial. Chile aparece en las estadísticas con incidencias mucho mayores que la mayoría de los países, especialmente en lo que respecta a mujeres. Alrededor de un 20% de la población tiene algún trastorno asociado a ansiedad, y 5 de cada 10 mujeres tienen problemas de este tipo.
Para la realidad de nuestro país, es decir, con el asunto del Transantiago, el problema educacional y los pingüinos, la mala calidad de la salud pública, los programas de generación de empleo, los problemas de la delincuencia, los asaltos y la inseguridad ciudadana, el acoso sexual laboral, los anarquistas, el alza de la bencina, las barras bravas, etc. Con este extracto de lo que se vive a diario, creo que nuestra sociedad tiene menos tiempo para hacer algo al respecto. Esperemos que nosotros, como jóvenes, podamos luchar por un mejor futuro, tanto cercano (como lo son las fechas de las solemnes) como también las más lejanas (en el ámbito laboral).
El estrés es básicamente un fenómeno fisiológico de reacción del organismo ante diversos estímulos del medio en que uno se desenvuelve, y que evidentemente, al estar expuesto a un sostenido, prolongado, e intenso estrés, puede provocar una serie de desórdenes a la salud física y mental del individuo. Incluso, se ha demostrado científicamente, que el estrés provoca enfermedades. Hay típicas enfermedades propias del estrés como la hipertensión arterial, la diabetes, el hipertiroidismo, la obesidad, la angustia y la depresión.
Generalmente cuando una persona se está estresando aumentan sus latidos cardíacos, le sube la presión arterial y el calor corporal de la piel aumenta. Consignemos también que este problema no se cura, debido a que el estrés no es una enfermedad. Sin embargo, sí podemos medir el estrés, podemos prevenirlo y podemos aprender a controlarlo y, desde luego, estas son técnicas que ya se están desarrollando para ayudar a la gente a prevenir el estrés generado por la vida moderna.
Cabe señalar que el estrés también produciría cierta adicción a las drogas y al alcohol, por lo que podemos llegar a considerar que este fenómeno de la drogadicción y el alcoholismo, más los antes ya señalado sobre la depresión, que tenemos que estar concientes de la calidad de vida que llevamos como sociedad, como Chilenos, como también podemos tomarlo como índice para darnos cuenta que medidas tomar para solucionar dichos flagelos.
Estadísticas en Estados Unidos muestran que en el año 2020 la depresión va a ser una de las patologías más frecuentes en la población mundial. Chile aparece en las estadísticas con incidencias mucho mayores que la mayoría de los países, especialmente en lo que respecta a mujeres. Alrededor de un 20% de la población tiene algún trastorno asociado a ansiedad, y 5 de cada 10 mujeres tienen problemas de este tipo.
Para la realidad de nuestro país, es decir, con el asunto del Transantiago, el problema educacional y los pingüinos, la mala calidad de la salud pública, los programas de generación de empleo, los problemas de la delincuencia, los asaltos y la inseguridad ciudadana, el acoso sexual laboral, los anarquistas, el alza de la bencina, las barras bravas, etc. Con este extracto de lo que se vive a diario, creo que nuestra sociedad tiene menos tiempo para hacer algo al respecto. Esperemos que nosotros, como jóvenes, podamos luchar por un mejor futuro, tanto cercano (como lo son las fechas de las solemnes) como también las más lejanas (en el ámbito laboral).
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